Precios del petróleo tienen en jaque la economía venezolana
La alta dependencia a las importaciones compromete lo más cotidiano. El país cuenta con un total aproximado de un millón 150 mil barriles diarios de petróleo para su venta en efectivo. Si se toma en cuenta el precio actual de 24,38 dólares, el ingreso mensual que tendrá el país es de 828 millones de dólares.
Con este ingreso, se necesitarían cuatro meses para acumular los tres mil 500 millones de dólares que requiere la industria de alimentos para resolver el problema de producción y abastecimiento en los primeros 120 días del año, de acuerdo con la propuesta de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea).
La entrada de divisas mensuales por petróleo sería insuficiente hasta para abastecer el mercado alimentario nacional con importaciones. Según Carlos Dickson, presidente de Fedecámaras Zulia, se requieren mil 500 millones de dólares mensuales.
Este es el resultado de una “política equivocada, que privilegiando a las empresas extranjeras, desestimuló a los productores nacionales”, dice el empresario.
Venezuela pasa así a ser el paraíso del oro negro en dificultades, que cuenta con las mayores reservas y es el quinto exportador mundial de petróleo. A pesar de que todos los países comercializadores del crudo padecen por la caída del 72 por ciento de su precio, para el adeudado país con altos índices de inflación, esta fue la gota que colmó el vaso.
En 24 dólares se situó el barril esta semana, el importe más bajo en 12 años. José Toro Hardy, exdirectivo de Petróleos de Venezuela, asegura que a pesar de que el Gobierno alega que la producción diaria se sitúa en tres millones de barriles, las cifras oficiales son “muy poco transparentes”.
De acuerdo con sus estimaciones, la estatal Petróleos de Venezuela produce cerca de dos millones 500 mil barriles al día, de los cuales más de 500 mil están destinados al pago de la deuda con China, cerca de 700 mil al consumo interno -vendido a pérdidas por el significativo subsidio de la gasolina en el país- y entre 150 mil y 300 mil se reservan a convenios energéticos como Petrocaribe y Petroamérica, cuyos clientes compran petróleo con créditos a largo plazo.
La deuda
El escenario económico por la caída de los precios del petróleo se le complica al Gobierno. Este año debe pagar nueve mil 500 millones de dólares por concepto de vencimientos e intereses de deuda externa en un escenario en el que ingresan 27 millones 600 mil dólares diarios por la venta de petróleo, y de mantener el precio de barril en 24 dólares serían 10 mil 74 millones de dólares al año. Un monto cercano a los 10 mil 500 millones que el ejecutivo del presidente Nicolás Maduro pagó en deuda en 2015, recurriendo a las reservas internacionales, que registraron niveles mínimos en 12 años.
El economista Miguel Ángel Santos indicó que Venezuela inició este año sin reservas líquidas, habiendo agotado sus derechos de giro en el Fondo Monetario Internacional y pignorado 30 por ciento de sus reservas en oro. La probabilidad de que los países hermanos a los que benefició Petrocaribe pague es muy baja. De 25 mil millones que le debe el convenio a Venezuela, 80 por ciento corresponde a Cuba, unos 15 mil millones de dólares. Nicaragua también se incluye en la lista, manteniendo un compromiso de pago de tres mil 500 millones de dólares y Haití con mil 500 millones de dólares.
Así se enciende la alerta de default. Las calculadoras de riesgo no apuestan por el país y ubican su índice en 35,4 por ciento. “Es decir, los mercados financieros efectivamente cerrados para Venezuela”, asegura Santos.
El mercado
Venezuela experimenta la situación más grave de los ingresos de la nación en los últimos años, la cual no parece que vaya a dejar de empeorar. Debido a la disminución de demanda de crudo por el mercado chino y la incorporación de Estados Unidos e Irán, cálculos de Morgan Stanley y Standard Chartered ubican entre 20 y 10 dólares el fondo que deba tocar el precio del barril de petróleo antes de volver a subir.
No solo es el petróleo venezolano el que sufre este importante descenso. Todos bajan de 40 dólares. Esta semana el Brent cotizó en 31,46 dólares, el WTI en 31,34 dólares y la cesta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo en 26,40 dólares.
La Ley de Presupuesto Anual para 2016 efectuó su cálculo en base a un precio de petróleo de 40 dólares. Apenas es enero y a esa cifra la realidad casi la divide en dos. El presidente Maduro lo admitió, no hay ninguna perspectiva de que a corto o a mediano plazo el mercado petrolero mejore, afectando el ingreso de 70 por ciento de las divisas. La Opep confirma la premisa manteniendo su negativa a efectuar una reunión para afrontar esta caída.
Casi vaticinando esta situación, se planificó que los ingresos por impuestos fuesen significativamente mayores a los petroleros. El experto petrolero José Toro Hardy explica que esta solución no es tan simple como parece, pues no evita las repercusiones de las distorsiones macroeconómicas: “Aumentar el impuesto equivale a exprimir más la esponja, pero si la esponja está seca, al aumentar los impuestos, por más que la imprimas no sale nada. Lo que hace el Gobierno es imprimir dinero inorgánico para cubrir el déficit fiscal, y ese es el principal causante de la inflación”.
Barriles comprometidos
Producción diaria: 2.500.000 barriles
Consumo interno: 700.000 barriles
Por pago a China: 500.000 barriles
Convenios energéticos: 150.000 barriles
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