A UN CLIK, CON LARISSA COSTA
Colas, desabastecimiento, inflación. Fenómenos que en condiciones normales tienen explicaciones económicas clásicas, deben ser hoy evaluados en función de la configuración de actores que atacan el sistema financiero y comercial venezolano con fines políticos.
Variables en mano, Larissa Costas revisa en esta entrega la investigación de Pasqualina Curcio, profesora del Departamento de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Simón Bolívar.
Allí demuestra que estos fenómenos no son causados por desequilibrios en la economía real, como tampoco son consecuencia de desequilibrios en la balanza de pagos, sino que responden a intereses políticos de parte de algunos sectores, cuyas acciones buscan desestabilizar la economía nacional, afectar a los hogares venezolanos y por tanto debilitar el modelo social, económico y político instaurado a partir de 1999.
La socialización de estos datos cobran importancia en el actual contexto político en que el Gobierno Bolivariano toma las medidas necesarias para transformar el modelo rentístico petrolero en una economía productiva que pueda satisfacer las necesidades del pueblo venezolano en medio de un desequilibrio mundial producto de la crisis del capitalismo que ha permitido, entre otras cosas, depreciar el precio de los hidrocarburos, golpeando fuertemente los planes de desarrollo de economías como la nuestra.
Colas, desabastecimiento, inflación. Fenómenos que en condiciones normales tienen explicaciones económicas clásicas, deben ser hoy evaluados en función de la configuración de actores que atacan el sistema financiero y comercial venezolano con fines políticos.
Variables en mano, Larissa Costas revisa en esta entrega la investigación de Pasqualina Curcio, profesora del Departamento de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Simón Bolívar.
Allí demuestra que estos fenómenos no son causados por desequilibrios en la economía real, como tampoco son consecuencia de desequilibrios en la balanza de pagos, sino que responden a intereses políticos de parte de algunos sectores, cuyas acciones buscan desestabilizar la economía nacional, afectar a los hogares venezolanos y por tanto debilitar el modelo social, económico y político instaurado a partir de 1999.
La socialización de estos datos cobran importancia en el actual contexto político en que el Gobierno Bolivariano toma las medidas necesarias para transformar el modelo rentístico petrolero en una economía productiva que pueda satisfacer las necesidades del pueblo venezolano en medio de un desequilibrio mundial producto de la crisis del capitalismo que ha permitido, entre otras cosas, depreciar el precio de los hidrocarburos, golpeando fuertemente los planes de desarrollo de economías como la nuestra.
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