Memorias de un escuálido en decadencia
Por: Roberto Malaver
Vamos a decirlo de una vez: Somos mediocres. El papel que estamos haciendo en la Asamblea Nacional no deja ninguna duda. Carlos Escarrá nos lo cantó varias veces después que habló el diputado del cheque de Pdvsa, Julio Borges. Fue el martes 14 de junio, fecha de la cual tengo ya el recuerdo. Escarrá nos llamó mediocres porque habíamos dicho que el viaje del dictador era ilegal, y zuas, nos pusieron un video donde lo habíamos aprobado. Y después no sabíamos qué decir, queríamos cambiar el concepto por el que nos invitaron a la Asamblea. Y Carlos Escarrá, el diputado del dictador, no solamente nos llamó mediocres, sino que nos recordó que Ramos Allup, y el fracasado a tiempo completo, Teodoro Petkoff, también nos llamaron mediocres.
Cada día veo más lejos la salida del dictador, con unos diputados como los que tenemos no vamos a llegar a ninguna parte. Tanto es así, que como dije la semana pasada, muchos de ellos se van de la Asamblea para ser candidatos a gobernadores y alcaldes. Es vergonzoso ese papelito que estamos haciendo allí. En la televisión podemos ver y oír las grandes pendejadas que decidimos, y lo peor, las vainas que no apoyamos. Allí está por ejemplo, Estados Unidos, nuestra máxima democracia, le aplicó unas sanciones a Pdvsa, y nosotros salimos de pendejos a apoyar a Estados Unidos. Después vino la ley de endeudamiento y salimos a preguntar ¿dónde están los reales?, como lo hizo el difunto Luis Herrera, esa bolsería es propia de analfabetos. Y ahora el dictador se va de viaje a Brasil, Ecuador y Cuba, y se enferma allí y lo operan y nos llaman de nuevo a la Asamblea y salimos a pedir que Chávez, el dictador, vuelva, porque eso es ilegal.
Con razón los chavistas nos tienen bien jodíos con esa vaina de que antes queríamos que el dictador viviera en Cuba, y ahora que está allá, nosotros pedimos que venga. ¿Cómo es la vaina, Ismael? Explíquenme, porque tengo el bruto a millón. Mi amiga Margot anda atacada con esa conducta, y dice que en la oposición parece que el único que tiene vida es Ramos Allup. Y fue Ramos Allup quien nos impidió hacer el ridículo en la Asamblea la vez pasada, porque él nos dijo que no fuéramos a esa vaina, y menos mal, porque se imaginan, el pueblo hubiese descubierto lo bruto y torpe y poco cosa que somos justo en aquel momento. Y les digo una vaina, yo creo que en la Asamblea pasada hicimos mejor papel, porque no estuvimos, así de sencillo.
A llorar al Valle, voy.
robertomalaver@gmail.com
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