...la amistad, el amor y la solidaridad nos desbordaron...
Me dirijo a todos los compañeros y camaradas venezolanos, a los fraternos amigos italianos, a las asociaciones de habitantes y de trabajadores, a los Grupos de Solidaridad, Partidos Políticos e individualidades del mundo laboral, intelectual y religioso; a los embajadores, encargados de negocios y otros funcionarios diplomáticos con el propósito de hacerles llegar respetuosamente nuestras más sentidas excusas y disculpas por no haber tomado las previsiones necesarias para que acompañaran y compartieran, de manera presencial, el Gran Encuentro Público con el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, celebrado el día de ayer lunes 17 de junio de 2013, en el “Palazzetto delle Carte Geografiche” ubicado en Via Napoli 36 de la ciudad de Roma.
Quiero en nombre del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, del canciller Elías Jaua y del mío propio ofrecer a todos nuestras EXCUSAS por no haber previsto que la solidaridad con Venezuela es cada vez mayor, es cada vez más inmensa y está hoy en un comprensible crecimiento que supera cada día las estimaciones optimistas con las cuales organizamos nuestros actos públicos.
En efecto, alquilamos un local con capacidad para 500 personas sentadas y la amistad, el amor y la solidaridad nos desbordaron. Fuera del recinto quedó una calle llena de ilusiones, de afectos, de auténtica solidaridad y de camaradería que sorprendió a más de once medios de comunicación que nunca antes nos tomaron en cuenta en la república de Italia y que, gracias a ustedes, nos han comenzado a mirar con todo el respeto y la dignidad que merecen nuestros pueblos.
Afortunadamente la calidad humana, la sencillez y la simpatía de nuestro presidente recibió la cercanía de quienes no pudieron estar cerca de el, oyó sus gritos y consignas de apoyo, se refirió a ellas en su largo discurso de alegría por la pasión que encontró en las afueras del lugar del encuentro.
Por instrucciones de la seguridad presidencial se cerraron las puertas. Tratamos de acudir a ustedes con una pantalla de televisión que les permitiera observar el acto y técnicamente fue imposible. De nuevo las excusas y mil perdones. Para la próxima oportunidad tomaremos en cuenta que la conciencia social de los pueblos no se disminuye, sino que cada vez más se multiplica. Gracias camaradas, gracias, muchas gracias. El presidente Nicolás Maduro aunque no pudo ver sus caras sabe de los afectos y de la solidaridad que entregaron. ¡Italia y Venezuela unidas de corazón a corazón, están y estarán siempre con su revolución.
Seguro de poder contar con la comprensión de todos ustedes y esperando saludarles en futuros eventos, les saludo con humildad y con sincero afecto Revolucionario y Bolivariano.
Julián Isaías Rodríguez Díaz – Embajador de la República Bolivariana de Venezuela en la República Italiana
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