viernes, 1 de abril de 2011

DIPUTADA LIRISOL VELÁSQUEZ NO DESCARTÓ...

... nuevos debates sobre el beneficio del bono alimentario.

No fue un rechazo, explica Liris Sol Velásquez, diputada de la Asamblea Nacional por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). 

Se trata de poner orden en el planteamiento de la oposición al promover la reforma de la Ley de Alimentación con una novedad: la entrega de cestaticket a pensionados y jubilados.

“Lo que se aprobó fue la Ley de Seguridad Social, que es integral. No se puede parcelar, que es lo que siempre ha utilizado el capitalismo”, explicó en conversación telefónica.

Según Velásquez, la aprobación del beneficio de un bono alimentario para los capacitados debería ser parte de la Ley de Seguridad Social.

“Eso tiene que ver con la tercera edad y es muy importante, pero no se puede fraccionar. La Asamblea Nacional no niega la posibilidad de estudiar el caso y que se apliquen nuevas solicitudes”, señaló.

Recordó que el 15 de enero, cuando Alfredo Ramos interrumpió a Hugo Chávez durante la presentación de la memoria y cuenta para anunciar la idea, el primer mandatario nacional se mostró dispuesto a llevarla adelante.

“El Presidente dijo a la oposición que no había problema y que podíamos echarle pichón, pero había que ver de dónde se sacaban los reales. Se pensó en el impuesto al lujo, para que la burguesía, la oligarquía y la empresa privada colaboraran”, rememoró.

El verdadero trabajo
La diputada oficialista, representante parlamentaria del municipio Caroní junto con Richard Rosa y Nancy Ascencio, justificó la proposición de la discusión sobre la reforma de la Ley de Alimentación señalando que, en la actualidad, no se encuentra en agenda.

“La agenda legislativa es contentiva de 28 leyes, que es bastante. Esas solicitudes deben ser revisadas, claro, pero todo esto forma parte del libreto que siempre ha tenido la oposición: decirle que no a lo que digan los diputados venezolanos”, acusó.

Refirió que la discusión sobre temas sociales está presente en la Asamblea Nacional con la reforma de las leyes del Trabajo y de Arrendamiento.

“Con esta última se hace el debut de la gente en la Asamblea Nacional. Podemos decir que tiene olor y sabor a pueblo. No fue una propuesta de un partido o de la Asamblea: salió del pueblo por una necesidad de regular la materia de inquilinato”, agregó.

La conclusión de Velásquez sobre las propuestas opositoras es una: “ellos pueden seguir impulsando leyes, pero hay que ver hasta dónde llegan porque sus propuestas son, básicamente, contra Chávez”.

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