Rosario: Nuestro pueblo se ha manifestado por la normalidad, tranquilidad, trabajo y paz
Estamos trabajando en estas últimas horas y días para disponernos todos a fortalecer el llamado al diálogo, aseguró
La Vicepresidenta de la República, Compañera Rosario Murillo, destacó que el pueblo nicaragüense se ha manifestado por la normalidad, la tranquilidad, el trabajo y la paz.
Nuestro pueblo se ha manifestado por la normalización de las clases en todo el país, lo cual quiere decir normalización de la vida, el estudio, el trabajo, el diálogo, la paz, insistió.
Manifestó que debemos dar gracias infinitas a Dios por ese llamado que nos estamos haciendo todos al diálogo y la paz.
Ese llamado que nos hace nuestro pueblo cuando se manifiesta expresando voluntad de serenidad, calma, tranquilidad, trabajo, ese llamado que tiene respuesta en la cantidad de escuelas que se abrieron el día de hoy (miércoles), 73. 9 por ciento es el promedio nacional de asistencia en el turno matutino, precisó.
Señaló que en Jinotega, la Costa Caribe del Sur, Nueva Segovia y Madriz se registró un promedio de 86.1 por ciento de asistencia.
Esto es una clara demostración de que los padres de familia, las familias, los muchachos, y muchachas, en general el pueblo nicaragüense, quiere normalidad, tranquilidad, seguridad, paz, “retorno a la calma y la serenidad, eso es lo que nuestro pueblo quiere, así es como nuestro pueblo se manifiesta, expresa su compromiso con la paz, con el diálogo, con la normalidad, con el imperativo de retornar a esa normalidad para continuar trabajando juntos y aprendiendo a trabajar mejor todos los días para prosperar”, subrayó.
La Coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía reiteró que Nicaragua quiere paz, diálogo y unidad.
Está emitiendo gracias infinitas a Dios señales profundamente positivas, de tranquilidad y normalidad. Nicaragua acoge con agradecimiento profundo a Dios nuestro Señor el llamado al diálogo que hemos hecho todos los sectores de nuestro país, nuestro Presidente el día domingo, esa aceptación extraordinaria de los señores obispos, de su Eminencia Reverendísima el Cardenal Leopoldo Brenes, de toda la Conferencia Episcopal, que nos indica que el amor a Cristo nos apremia y que acepta estar en carácter de mediador y testigo del diálogo convocado por el Presidente de la República, Comandante Daniel Ortega, el 22 de abril, aseguró.
En ese sentido, acotó que, para facilitar el clima de diálogo, consideran esencial e imperativo que tanto el Gobierno como cada miembro de la sociedad civil evite todo acto de violencia, de respeto a la propiedad pública y privada, y prevalezca un clima sereno y de absoluto respeto a la vida humana y a todos y cada uno de los nicaragüenses.
Resaltó que el Gobierno está, sobre todo, trabajando en estas últimas horas y días para disponernos todos a fortalecer el llamado al diálogo y a la paz, “el reclamo de respeto a todos, el respeto de todos con todos, el bien común como esencia del espíritu cristiano”.
Rosario insistió en que debemos seguir, “escuchándonos todos y en vigilias de oración, proclamándonos todos hijos de Dios, hermanos, familias en esta Nicaragua de bendición, de afirmación de la paz y las rutas de prosperidad y de victorias que debemos alcanzar todos juntos.
Agradeció los mensajes de todas las iglesias cristianas, evangélicas, que se pronuncian por el diálogo y por la participación en el mismo.
Estamos recibiendo esos mensajes con beneplácito y con la confianza de que su presencia en las mesas de diálogo contribuirá a que todos en Nicaragua proclamemos nuestro país como tierra nuevamente de paz, hermandad, bendición, de trabajo por más victorias. Que viva el encuentro, el diálogo, la paz y la reconciliación, puntualizó.
ale/ele
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