HORA DE CAMBIOS

Fabricio Ojeda el verdadero padre de la democracia.

La Junta Patriótica tenia como objetivo derrocar a Pérez Jiménez, y para ello organizó un dispositivo con los estudiantes y los sindicalistas, con lo cual logró contactar con los militares, especialmente con los cadetes, jóvenes oficiales, porque sin el apoyo militar no se podía derrocar al dictador. Una férrea campaña de propaganda contra la dictadura en las imprentas clandestinas, un choque abierto en la calle contra la Seguridad Nacional y la policía, acompañadas de pequeñas manifestaciones en los barrios.

El primero de enero de 1958 sorprende el alzamiento del Coronel Hugo Trejo. Este alzamiento, aún cuando fue sofocado, demostró que Pérez Jiménez no contaba con el apoyo de todo el Ejército. Ese alzamiento rompió el espinazo militar de la dictadura, que a partir de ese momento quedó profundamente debilitada.

Los días que anteceden al 23 de enero son de crisis política y militar.
El 20 de enero de 1958 se produjo el Pacto de Nueva York, que luego se conocería como el Pacto de Punto Fijo.
Fabricio Ojeda , gozaba de gran popularidad en la opinión pública para ese momento, y fue quien en la madrugada del 23 de enero hizo un llamado a la calma del pueblo tras la caída de la dictadura, y así reveló su identidad como presidente de la Junta Patriótica, la agrupación de los partidos políticos que condensó la unión de la fuerza popular y la militar para lograr la caída del General Marcos Pérez Jiménez.

Cuatro años mas tarde al renunciar como diputado al parlamento diría:

“El 23 de enero hubo sólo esto: un cambio de nombres. La oligarquía explotadora, los servidores del imperialismo buscaron acomodo inmediato en el nuevo gobierno. El poder político había quedado en manos de los mismos intereses y los instrumentos de ese poder seguían bajo la responsabilidad de las mismas clases”