RUMBO A LA CONSTRUCCION DE LA
ALCALDIA MODELO
Una alcaldía modelo debe
contar con hombres y mujeres con una visión revolucionaria, socialista,
bolivariana y fabricista, con una convicción férrea y sólida de querer hacer
una gerencia honesta, proba, eficiente, además
que estén comprometidos y comprometidas verdaderamente en la
construcción del poder popular.
El pueblo debe elegir a unos
genuinos líderes con una verdadera vocación de servicio, con conciencia
revolucionaria y convencido de la necesidad de enderezar el proceso
revolucionario, depurándolo, limpiando la casa por dentro, y así poder
construir un gobierno municipal modelo, ejemplar, que no se parezca en nada a
los de la cuarta y que entierren
definitivamente los vicios que en la quinta República se vienen arrastrando.
¿Y cómo se
logra? En primer lugar el pueblo debe superar el analfabetismo político, de no
ser así se estaría tropezando con la misma piedra y lo que es peor aún, los
cuatro picaros de siempre serán los que se aprovechan de los beneficios que
deben ser para el pueblo.
Contraloría social. Una vez que el pueblo se
eduque políticamente se deben realizar
asambleas populares para que estas escojan lo que se denominaría la Comisión de Contraloría Social Popular.
Una comisión con poder de supervisar en
caliente la administración de los recursos del municipio, ingresos y egresos.
Igualmente debe estar comisionada para hacer seguimiento de las obras y
proyectos de los municipios, no solo llevados a cabo por las alcaldías sino
también por los Consejos Comunales
Comunales. Eso permitiría al pueblo saber que destino tienen los
recursos, en que se están gastando, además de priorizar las necesidades más
urgentes que tiene el municipio.
El Fondo Mixto Público y Privado. Otra norma que la Alcaldía
Modelo debe hacer es crear el Fondo Mixto Público y Privado (FMPP), para
contribuir con el desarrollo del municipio y acabar con la vacuna en el cobro
de comisiones a empresas privadas que se
dedican al comercio, industria y servicios. El cobro de comisiones para
adjudicar obras a empresas privadas se volvió casi ley, y dichas contribuciones
deben ir al Fondo Mixto Público y Privado en vez de llegar al bolsillo del
alcalde. Igualmente el FMPP debe ser supervisado por la Comisión de Contraloría
Social Popular. Esto encaja perfectamente en el espíritu y la letra de las 5
leyes del poder popular.
CORRIENTE DEL PENSAMIENTO
BOLIVARIANO Y SOCIALISTA “FABRICIO OJEDA”, TRUJILLO, FEBRERO DE 2.013.
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