Con el cambio de gobierno, un sector importante de la mafia pierde poder y se posesiona otro, los uribes, los joses obdulios, quienes ahora se niegan a responder a los requerimientos de la justicia, se encargarán de dañarle la fiesta a Juan Manuel Santos, para encaminarlo por los mismos senderos uribistas.
Este carro bomba es una demostración de poder, de los sectores mafiosos, que durante los ocho años de uribe, se posesionaron en las posiciones más altas del poder político, militar y administrativo, pues hacen parte del régimen político. Estos sectores no se resignan a perder sus privilegios.
Interesante reconocer que ningún miembro del gobierno actual se apresuró a señalar, como lo vimos antes en el gobierno saliente, a la insurgencia colombiana como autora del mismo. Cada hecho de violencia, era reportado por el régimen de Uribe Vélez, inmediatamente como acción de la insurgencia.
ANNCOL no tiene ninguna duda que sectores mafiosos poderosos están detrás del atentado, sobre todo ahora que las relaciones de dos naciones hermanas camino a normalizarse, como deja entrever la visita del Presidente Chávez.
Ante este coletazo de las mafias se vislumbra en los próximos días, acciones de guerra para acallar testigos, eliminar a potenciales testimonios ante la justicia, y ajustar las cuentas con el cambio de gobierno. Extraño el pedido de prolongación de licencia para dejar el país por parte del presidente saliente, cuando debería estar aquí, dándole cara a la justicia colombiana.
Las fuerzas mafiosas le acaban de mandar un mensaje clarito al presidente entrante. Recordemos que el nombramiento, de Vargas lleras no gustó mucho al patrón de Antioquía, esos y otros pasos dados por el recién ungido presidente, han pisado callos, entre ellos intentar normalizar las relaciones con Venezuela.
Los coletazos del uribismo de provincia. Enfrentando con bombas terroristas a la rancia oligarquía capitalina.
(Fuente: ANNCOL)
Este carro bomba es una demostración de poder, de los sectores mafiosos, que durante los ocho años de uribe, se posesionaron en las posiciones más altas del poder político, militar y administrativo, pues hacen parte del régimen político. Estos sectores no se resignan a perder sus privilegios.
Interesante reconocer que ningún miembro del gobierno actual se apresuró a señalar, como lo vimos antes en el gobierno saliente, a la insurgencia colombiana como autora del mismo. Cada hecho de violencia, era reportado por el régimen de Uribe Vélez, inmediatamente como acción de la insurgencia.
ANNCOL no tiene ninguna duda que sectores mafiosos poderosos están detrás del atentado, sobre todo ahora que las relaciones de dos naciones hermanas camino a normalizarse, como deja entrever la visita del Presidente Chávez.
Ante este coletazo de las mafias se vislumbra en los próximos días, acciones de guerra para acallar testigos, eliminar a potenciales testimonios ante la justicia, y ajustar las cuentas con el cambio de gobierno. Extraño el pedido de prolongación de licencia para dejar el país por parte del presidente saliente, cuando debería estar aquí, dándole cara a la justicia colombiana.
Las fuerzas mafiosas le acaban de mandar un mensaje clarito al presidente entrante. Recordemos que el nombramiento, de Vargas lleras no gustó mucho al patrón de Antioquía, esos y otros pasos dados por el recién ungido presidente, han pisado callos, entre ellos intentar normalizar las relaciones con Venezuela.
Los coletazos del uribismo de provincia. Enfrentando con bombas terroristas a la rancia oligarquía capitalina.
(Fuente: ANNCOL)
1 comentario:
Es qie eñ "patroncito" ahora es cuando tiene poder. Nombrado por la ONU para presidir comisión que investiga atentado israeli al boto turco. Cuestión de tener amigos influyentes.
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