Por: Pedro Marillán Sánchez (*)
Ha llegado la fiebre del mundial de futbol, evento que apasiona a multitudes entre expertos y los que solo se entusiasman cada 4 años. Las vitrinas de tiendas, negocios de comidas y vendedores en general en todo el mundo vendiendo banderas, franelas, pulseras gorras pañuelos y todo lo relacionado con esta magna justa futbolística.
El futbol para muchos es llamado el deporte rey o mejor dicho dentro de las disciplinas colectivas es de un alto nivel competitivo. Llamo la atención a los fanáticos en los cuales me incluyo y fanáticas que podremos observar por la Televisión cada partido y cada quien con sus preferencias, unos por países Europeos, Asiáticos o Caucazos otros por Arabes, Persas o Africanos y nosotros los Latinos que comprenden América del Sur, Norte y Centroamérica, aupando por ellos que nos representan como continente. Sin embargo la vida en cada lugar del planeta continúa su ritmo, y en aquellos donde hay dificultades sociales muy serias, se detendrán por 90 minutos a disipar tensiones para asumir las naturales que de la sangre fluyen. Pero la realidad imperante en el Medio Oriente, Irak, Afganistán, Palestina, en Asia el conflicto de las dos Coreas, Grecia, España, Centroamérica (HONDURAS), país que participa en esta justa, México, asediado por el narcotráfico, y nosotros en América del Sur con un país vecino, invadido por el ejército imperial de los Estados Unidos. La verdad que no podemos darnos licencia, imposible abandonar las trincheras y dejarnos llevar por una esférica que rodará por esos estadios africanos. El enemigo siempre aprovecha nuestros descuidos y debilidades. La retaguardia más bien debemos fortalecerla y sin dejar de disfrutar los 90 minutos, debemos hacerlo desde nuestras trincheras y cada compañera y compañero transformarnos en centinelas de cada rincón de la Patria.
Suerte a todos los países participantes y que gane el mejor.
OJO PELAOOOO…….
La Patria, a no descuidarla ni por un segundo.
(*) Comunicador Social Comunitario
pedromarillan@hotmail.com
Ha llegado la fiebre del mundial de futbol, evento que apasiona a multitudes entre expertos y los que solo se entusiasman cada 4 años. Las vitrinas de tiendas, negocios de comidas y vendedores en general en todo el mundo vendiendo banderas, franelas, pulseras gorras pañuelos y todo lo relacionado con esta magna justa futbolística.
El futbol para muchos es llamado el deporte rey o mejor dicho dentro de las disciplinas colectivas es de un alto nivel competitivo. Llamo la atención a los fanáticos en los cuales me incluyo y fanáticas que podremos observar por la Televisión cada partido y cada quien con sus preferencias, unos por países Europeos, Asiáticos o Caucazos otros por Arabes, Persas o Africanos y nosotros los Latinos que comprenden América del Sur, Norte y Centroamérica, aupando por ellos que nos representan como continente. Sin embargo la vida en cada lugar del planeta continúa su ritmo, y en aquellos donde hay dificultades sociales muy serias, se detendrán por 90 minutos a disipar tensiones para asumir las naturales que de la sangre fluyen. Pero la realidad imperante en el Medio Oriente, Irak, Afganistán, Palestina, en Asia el conflicto de las dos Coreas, Grecia, España, Centroamérica (HONDURAS), país que participa en esta justa, México, asediado por el narcotráfico, y nosotros en América del Sur con un país vecino, invadido por el ejército imperial de los Estados Unidos. La verdad que no podemos darnos licencia, imposible abandonar las trincheras y dejarnos llevar por una esférica que rodará por esos estadios africanos. El enemigo siempre aprovecha nuestros descuidos y debilidades. La retaguardia más bien debemos fortalecerla y sin dejar de disfrutar los 90 minutos, debemos hacerlo desde nuestras trincheras y cada compañera y compañero transformarnos en centinelas de cada rincón de la Patria.
Suerte a todos los países participantes y que gane el mejor.
OJO PELAOOOO…….
La Patria, a no descuidarla ni por un segundo.
(*) Comunicador Social Comunitario
pedromarillan@hotmail.com
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