HORA DE CAMBIOS

EL VOTO INMORAL

Roger Capella Mateo

 Afirmar que todos los opositores a nuestro gobierno son un atajo de corruptos, criminales, o fascistas (aunque cada día hay más), sería tan grave como acostumbran hacer los escuálidos cuando se refieren a la mayoría Bolivariana, Chavista de Venezolanos. Supongo que también se refieren a esa numerosa humanidad que en cada País del planeta, así como, hemos oído siempre,  se calificaban de marxistas, de leninistas, de Fidelistas, de Guevaristas, hoy se califican de Chavistas.

        Durante la cuarta república la partidocracia venezolana en sus procesos electorales propusieron numerosos ciudadanos en los que había gente honorable (con los que no compartíamos numerosos puntos de vista), pero también corruptos, esbirros, tránsfugas, etc. Pero la complicidad automática, la corrupción como práctica generalizada y creciente ( recuérdense frases como ...”los adecos roban pero dejan robar", u otra como que..:" no me den pero ponganme donde "haiga""...), la existencia de listas negras en los escritorios de recursos humanos de casi todas las empresas, con los nombres de aquellos sindicalistas "de izquierda", la delación ( sapeo ) de "subversivos", aunque fuesen amigos, por lealtad al partido, o por dinero, la compra de voluntades en los procesos electorales a partir de la miseria o la ignorancia de nuestro pueblo.

El "desvío" o robo de recursos producto de la renta petrolera, o de comisiones, o de la especulación, que fueron colocados en bancos extranjeros y algunos nombres y los nombres de los bancos y las cantidades fueron del conocimiento público. La perversa relación en los préstamos del FMI o del banco mundial y los burócratas que los contrataban. Solo hasta aquí, porque la lista de delitos es muy larga, hizo que a los venezolanos nos propusieran numerosos personajes, íconos de cualquier inmoralidad, pero la propaganda mediática y el silencio cómplice de los medios los hacia ver como verdaderos benefactores de la Patria. Y la gente votaba por ellos. La toma de conciencia progresiva de estas realidades fue convirtiendo a muchos compatriotas en electores consientes y se expresó en cierto modo en las elecciones del 93 y de manera contundente en las del 98 cuando resultó electo nuestro siempre amado Hugo Chávez.

         La conquista de esta democracia participativa, de esta extraordinaria constitución, de la inmensa e inconmensurable labor de pedagogía política del Presidente Chávez que dotó a nuestro pueblo, al menos a una evidente mayoría de conciencia política, ha permitido que hoy podamos tener información sobre los males del burocratismo, de la corrupción de los violentos y criminales, de los apátridas, del colaboracionismo con nuestros enemigos extranjeros.

         Ese debate permanente en el seno de nuestra sociedad de temas de interés de todos, ha permitido, entre otras cosas, poner en evidencia a los corruptos de hoy. Seguramente no a todos, por ahora. Existen en nuestras filas, rojo rojitas, y por supuesto en la de los escuálidos. Claro, existe una diferencia entre ambos sectores. Los que pillamos en nuestro gobierno son denunciados públicamente, hechos presos y sometidos a juicio. No nos importan las consecuencias políticas inmediatas, porque estamos construyendo una nueva sociedad, donde los corruptos no caben. Entre otras cosas, por ello hoy tenemos PATRIA. Otra cosa muy diferente ocurre en el campo escuálido. Basta que sean evidenciados y acusados, cuando se montan en cualquier avión y se van a cualquier nicho de bandidos en el mundo y tienen el cinismo, la sinverguenzura, la canallada, la carencia de coraje, la inmoralidad de calificarse de "perseguidos políticos" y todisimo el coro de la MUD los acompaña  y los aplaude y coloca en la lista de mártires del régimen Chavista. Algunos hasta se han fugado de cárceles del País y se piran como ratas.

         Pero en estas elecciones del 8-D, había dos conocidos personajes de esta clase delincuencial, la alcaldesa de Maracaibo, Evelin Trejo y el comerciante Cocolía en Valencia. Por citar dos conocidos. Ciertamente ha existido bastante impunidad por parte del Estado con los escuálidos en estos casos. Ojalá que con estos no ocurra lo mismo.

          El drama está en ver como la MUD le propone a la sociedad estos personajes para ser electos, y la gente los vota. Será que no les importa? Será que dicen:...."este corrupto (a) es mío y que?". Esa es la sociedad que estos escuálidos quieren construir, llevar a numerosos venezolanos a una evidente disociación psicótica, al odio enfermizo, a sentirse parte de la inmoralidad, al vivalapepismo aberrante, al raspatarjetismo, sin importarle un comino esta Patria que tanto amamos. Claro que esto no es nuevo, basta recordar como poncio pilatos manipulo al pueblo de Judea para que aclamase a barrabas. Jesús fue el crucificado.  Este voto inmoral, por candidatos inmorales, no despierta la menor reflexión en los que tanto van a misa y comulgan, no se confesaran diciendo: he votado por un inmoral como Cocciola o Trejo. Este es el drama y el reto de nuestra Revolución. Necesario es recuperar a todos los venezolanos para  consolidar la PATRIA. No basta con haber sacado un millón de votos más que la oposición. La moral que nos enseñó nuestro comandante Hugo Chávez debe ser patrimonio de todos o casi todos.