domingo, 1 de febrero de 2015

ANTONIA MUÑOZ


La guerra contra la Revolución Bolivariana pareciera estar entrando a su etapa clímax, no sólo por la voracidad del saqueo de todos los bienes que se producen e importan, sino porque ahora los enemigos de la Patria (derecha internacional y nacional) han decidido arreciar la campaña, con la inocultable intención de producir el asesinato moral de las instituciones y dirigencia política; y como muestra, la temeraria acusación que han lanzado contra la Asamblea Nacional y contra el PSUV, en la persona de Diosdado Cabello. La ultraderecha no necesita pruebas, le importa bien poco lo que establece la Constitución venezolana (Artículos 57 y 60) y las leyes que de ella se derivan. La ultra derecha cree en la estrategia y postulados de Joseph Goebbels, jefe de la estrategia comunicacional de Adolfo Hitler: “una mentira repetida suficiente número de veces se convierte en verdad”. Las intrigas son un arma política poderosísima porque permiten engañar al pueblo, que al final termina desmoralizándose, porque al menos la duda, que es el menor de los efectos, queda “clavada como una espinita en el corazón” y en alma.
En relación a lo anterior, y con la intención de recomendar a las y los revolucionarios inmunizarse contra las intrigas, nos permitimos recordar algunos pensamientos de El Libertador Simón Bolívar: POR EL ENGAÑO SE NOS HA DOMINADO MÁS QUE POR LA FUERZA. “HACE MÁS EN UN DÍA UN INTRIGANTE, QUE CIEN HOMBRES DE BIEN EN UN MES”. “LOS INTRIGANTES CORROMPEN LOS PUEBLOS, DESACREDITANDO LA AUTORIDAD”. “MIS ENEMIGOS ABUSARON DE VUESTRA CREDULIDAD, Y HOLLARON LO QUE ME ES MAS SAGRADO, MI REPUTACIÓN Y MI AMOR A LA LIBERTAD…” A Bolívar lo asesinaron moralmente a punta de calumnia. Lo mismo intentaron con Chávez. Se calumnia y se intriga para desmoralizar y engañar al pueblo. Imagínense el efecto demoledor de la intriga y de la calumnia, potenciado con la fuerza de los medios de comunicación, que hoy en día son las armas más potentes que tiene el imperio norteamericano y sus aliados, externos (Verbigracia el diario ABC de España y sus similares) e internos, tan conocidos que no hace falta ni mencionarlos.
¿Y CUÁL ES EL PRECIO JUSTO?
A pesar del resurgimiento de la intriga como un elemento ponzoñoso y a la vez distractor en esta guerra declarada por el imperio norteamericano con la intención de derrocar el gobierno presidido por Nicolás Maduro, hoy queremos profundizar un aspecto económico que debe tomarse muy en serio para que la producción de alimentos sea una actividad rentable, sin que esto sea sinónimo de especulación o usura. No abundamos en este punto porque ha sido explicado innumerables veces. Sólo diremos que el Precio de Venta Justo de cualquier bien, es el producto del costo de producción o importación, más el costo de distribución, más la ganancia justa que debe obtener quien quiera que se dedique a cualquier actividad económica. Ya la Ley de Precio Justo, en su artículo 32 establece que “en ningún caso el Margen Máximo de Ganancia de cada actor de la cadena de comercialización excederá de treinta (30) puntos porcentuales de la estructura de costo del bien o servicio”.
Desde esta trinchera decimos por enésima vez que no todo el que se dedica a una actividad económica debe obtener el margen máximo de ganancia. Quien fabrica calzados no puede obtener la misma ganancia que quien los vende. Un matadero o carnicería no puede obtener la misma ganancia que quien cría el becerro desde que nace hasta llevarlo a peso de matadero, proceso que cuando es eficiente tarda 2 años y cuando es ineficiente puede durar 3 y hasta 4 años. La ganancia debe ser proporcional al trabajo y al riesgo que se asume en la actividad económica que se realiza. Si vender es más lucrativo que producir, se desestimula la producción y la actividad manufacturera. Las autoridades de la SUNDDE deben hacer esta aclaratoria hasta que el punto sea comprendido. Además, deben cuidar cómo dicen las cosas, porque “la palabra tiene poder”.
En relación a los costos de producción, debe vigilarse el precio de cada componente que interviene en la cadena de comercialización. Alguien pudiera creer que el costo de: un kg. de semilla de pasto, un pase de rastra, un rollo de alambre de púa, un estantillo y hasta un kg de grapa no influye en los costos de un litro de leche o de un kg. de carne. También influye en el precio de la leche y de la carne el precio de: los alimentos balanceados para vacas lecheras, mezcla mineral tan necesaria para la nutrición de los rumiantes alimentados a base de gramíneas y los productos de uso veterinario en general. Por supuesto que también influyen en el costo de producción de la leche y la carne, el costo de la mano de obra. Aunque considerando el Objetivo Histórico Nº 5 del Plan de la Patria, no recomendamos el uso de “potrerón” para controlar malezas hojas ancha en los pastizales, el incremento de los precios de este herbicida afecta negativamente el bolsillo de las y los ganaderos. So pena de que nos llamen brutos, a los educadores nos gusta abundar en ejemplos para que hasta el menos interesado en el tema entienda.
Finalmente, y con base a lo anterior, me permito expresar nuestra gran preocupación por un run- run que se oye en relación a un inminente aumento en el precio del fertilizante fórmula completa (NPK), úrea (sólo nitrógeno) y Cloruro de potasio (KCl). Una humilde recomendación: revisen esa medida porque su aplicación lineal en este momento puede afectar seriamente los costos de producción del arroz de verano y del maíz (blanco y amarillo), sorgo y arroz que sembraremos en la época lluviosa (mayo- junio 2015). CHÁVEZ VIVE. LA LUCHA POR LA PATRIA SIGUE).

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