¿Quién dice que Chávez ha muerto?
El deceso de un hombre consagrado a su pueblo, y más allá de su pueblo, no apaga la llama que en su interior lo mueve, como el corazón a la sangre, por los llanos de Venezuela, por la cordillera de los Andes, por los caudalosos ríos y el interior de las selvas, buscando al pobre, al enfermo, al analfabeto, para con su bondad limar aquello que, por siglos de injusticia, hicieron de los desposeídos su modo de vida.
Chávez, al morir, nació, como nacen todos los hombres que, como él, nacen, crecen y viven dentro del pueblo dando lo mejor de sí por el bien de todos, y en este sentido llegó a lo más alto del Podio junto a Bolivar, Martí, el Che. Desde allí, blandiendo la espada de Bolivar, penetra en el ser de cada hombre y mujer que no se arrodilla ante la injusticia, que no se doblega ante la amenaza imperialista y sus mercenarios internos, y con bravura defiende las conquistas que su presidente les dejó antes de pasar a otra forma de vida.
Cuánta razón tenía y tiene su pueblo al decir: Chávez no se va. Ilusos los que dicen que se fue. Ahora está más presente que nunca, multiplicado en millones de venezolanos que no permitirán que muera, y para ello defenderán las razones por las que luchó el Presidente más digno de todos los tiempos en ese hermano país, y es paradigma de quien está llamado a defender los intereses de su pueblo. Tampoco permitiremos que muera los que, desde otra tierra, nos hermanamos a él y a su pueblo, porque luchamos por la vida, contra lo injusto, contra el malvado imperio y sus mercenarios que odian a la humanidad.
Viva, por siempre, nuestro querido Comandante Chávez.
Luis Matos
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