lunes, 23 de noviembre de 2015

José Vicente Rangel: La campaña del gobierno de Obama contra Venezuela ha pasado a la jurisdicción militar

JVR editorial*Editorial del programa en Televen “José Vicente hoy”: 22-11-2015

Todo indica que la campaña electoral de la oposición, que no se percibe salvo en los conciliábulos de la MUD y en algunos medios de comunicación que la sirven, pero que no se observa en la calle para desesperación de la gente opositora, la está haciendo directamente el gobierno norteamericano.
Advierto a la audiencia que no se trata de una mamadera de gallo mía en relación a un tema extremadamente delicado que tiene que ver con la soberanía nacional, pero lo cierto es que todo el mundo se pregunta dónde está la oposición a pocos días del evento electoral del 6 de diciembre. Salvo en unas encuestas, que ya se sabe cómo actúan en elecciones polarizadas y los chascos que se han llevado, la oposición no tiene campaña. Lo que se conoce como campaña, es decir, amplia movilización popular, mítines, asambleas que sirven para actualizar el funcionamiento de las maquinarias partidistas, para presentar programas, para motivar a los electores, no tiene.
¿Qué significado tiene esta ausencia? Algunos analistas se atreven a señalar que se trata de una estrategia hábilmente urdida para desconcertar al chavismo. Una estrategia concebida por los cerebros políticos de la MUD para impedir que una demostración de fuerza de la oposición haga que el gobierno y el chavismo se asuste y a última hora suspendan las elecciones. Pero esta versión no se la cree nadie, porque tanto el gobierno como el chavismo han sido contundentes en afirmar que habrá elecciones llueve, truene o relampagueé y, al mismo tiempo, el Gran Polo Patriótico está movilizado, llamando a votar a los venezolanos.
Otra interpretación a la falta de campaña de la oposición es que ésta está convencida que habrá un fraude colosal, cocinado en el Consejo Nacional Electoral y que no vale la pena gastar esfuerzos en una campaña, en vez de emplearse a fondo en la denuncia del presunto fraude. Mi versión es otra, para mí la campaña que no hace internamente la oposición la viene haciendo el gobierno norteamericano a través de amenazas, bloqueos, campañas difamatorias contra el gobierno, contra líderes del Psuv, anuncios de procesos judiciales en territorio norteamericano y de acusaciones tramadas en organismos internacionales sobre violación de derechos humanos.
Pero hay más: la campaña del gobierno de Obama ha pasado a la jurisdicción militar, y sus voceros en el pentágono son generales con altas posiciones de mando, como es el caso del general John Kelly, jefe del Comando Sur y de la Cuarta Flota que se pasea amenazante por aguas del Caribe, quien ha tomado la vocería contra Venezuela. Que dice rezar todos los días cuando se levanta por nuestro país, y en uno de sus mensajes deslizó la perla de que en caso de darse una crisis humanitaria en Venezuela –léase hambruna- su dispositivo militar intervendría para ayudarnos a conjurarla. Ya en el pasado, una de las tantas invasiones de los EE.UU. a Haití se consumó inspirada en razones de tipo sanitario.
¿Para qué entonces esforzarse -pensarán los líderes de la oposición- en campañas electorales fatigosas, cuando el poder imperial se encarga de ese cometido? El rezo matinal de 40 segundos del general Kelly es para algunos más eficaz para acabar con el gobierno de Maduro que darle incesantes vueltas al país llamando a votar.

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