La bella Praga se ensombreció con la presencia de mercenarios cubanos y de varios furibundos detractores de oficio como Carlos García Pérez, director de la Oficina de Trasmisiones a Cuba, y el redactor jefe de Radio Praga, dentro del marco de la 17 sesión del Foro 2000., la que tuvo lugar entre los días 14 y 17 de septiembre. De varias latitudes llegaron “expertos” servidores de la USAID y de la CIA, empleados en la guerra ideológica contra naciones progresistas en el orbe.
Entre los participantes se encontraron el Dalái Lama, Aung San Suu Kyi (Birmania), así como varios miembros de la contrarrevolución interna como la provocadora Yoani Sánchez, Dagoberto Valdés (director de la revista digital Convivencia), Manuel Cuesta Morúa (Arco Progresista) e Yris Pérez Aguilera (presidenta del Movimiento Femenino por los Derechos Civiles Rosa Parks), John Suárez, del Directorio Democrático Cubano; y Antonio Rodiles, coordinador del Proyecto Estado de Sats. Al igual asistieron Vytautas Landsbergis, ex presidente de Lituania; Stanislav Shushkevich, expresidente de Bielorrusia, ex presidente Alejandro Toledo (Perú) y Joan Báez, compositora y cantante norteamericana.
Yris Pérez Aguilera y Aung San Suu Kyi.
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No pudieron faltar las alabanzas, como la hecha por la mercenaria Yoani Sánchez, quien se congratuló con este tendencioso evento y quien lanzó todo tipo de lisonjas en relación con el mismo, usando el lema Sociedad y Transición.
El encuentro dedicó una ponencia especial al papel de la radio en los procesos de transición, en el que participaron papagayos de emisoras anticubanas y de medios de comunicación opositores a procesos como el ALBA y varios países progresistas de América Latina, con el objetivo de implementar sus líneas mediáticas contra los mismos, particularmente contra Cuba y Venezuela.
A través de Freddy Valverde, miembro del staff de Radio Martí se aseguró la permanente cobertura al evento.
Este evento, devenido en un nuevo show mediático contra Cuba y Venezuela, particularmente, no tuvo otro relativo éxito que propiciar encuentros que permitirán apalancar a los contrarrevolucionarios dentro los ideólogos y figuras de la farándula derechista internacional. Las líneas subversivas trazadas por los organizadores y participantes definieron nuevas estrategias para los permanentes planes desestabilizadores contra sus respectivas naciones.
En fin, fue socialización, tertulias, paneles cargados de falacias y, sobre todo, búsqueda de nuevas fuentes de financiación para aumentar los dineros de los mercenarios de la Isla. Aunque la 17 sesión cerró sus puertas, se pudo saber que se mantendrán contactos posteriores -¿para qué?-, en Pilsen, Ostrava y Bratislava, capital de Eslovaquia.
Percy Francisco Alvarado Godoy
Otras fotos del evento provocador:
Dalái Lama robándose el show
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El ex presidente de Bolivia, Jorge Quiroga
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