HORA DE CAMBIOS

Patricia Villegas, corazón de Telesur 

 POR GLADYS SEARA

Patricia Villegas es madre y periodista egresada de la Universidad del Valle, en Cali. Foto archivo.

YVKE Mundial / Gladys Seara

Viste un uniforme verde oliva y la sonrisa hace que sus ojos achinados se cierren aún más. La mano derecha posa recta sobre la boina roja que lleva el escudo deVenezuela y la mirada va directo a quien sube las escaleras que conducen a la presidencia de Telesur. Debajo de ese retrato se lee: “Por siempre, comandante. Llorarlo sería poco, sigamos su ejemplo”.

Patricia Villegas no recuerda la primera vez que escuchó hablar del comandante Chávez, pero al menos tres hechos relacionados con él marcarán su vida para siempre: la iniciativa de crear Telesur, el día en que lo conoció y su muerte. “Lo conocí porque iba a entrevistarlo en octubre de 2005, cuando ya empezaron a salir los noticieros de Telesur. Lo vi y me pasó lo que le pasaba a todo el mundo, independientemente de la posición política, todos tienen ese relato: era un hombre de enormes proporciones”, recuerda la periodista.

Su hablar es calmado y su visión de periodismo se apega a la realidad de los excluidos. Desde el 5 de marzo de 2013 viste de negro y al mencionar a Hugo sus ojos se cargan de agua. Patricia Villegas es madre y periodista egresada de laUniversidad del Valle, tiene un diplomado en Periodismo para la Convivencia y también estudió en la Escuela de San Antonio de Los Baños y en el Instituto Ciespal de Ecuador.

Luego de que el personal de la cocina ofreciera café, Patricia se acomoda en la sala de reuniones para conversar. Su acento tiene música:

—Cuando Telesur dejó de ser una idea, para ser algo concreto, comenzaron a buscar periodistas de América Latina y así me encontraron a mí. Me citaron en el Aeropuerto de Cali para hablarme de un proyecto de nuevo periodismo latinoamericano. Para echarse el viajecito hasta el terminal aéreo había que tener ganas de escuchar el cuento y yo las tenía. Ni buscaba trabajo, ni me imaginaba salir del país para trabajar en otro. Desde ese día me apasionó Telesur y no pasaron dos meses después desde aquella conversación cuando yo ya estaba en Caracas.

 

Patricia Villegas conoció al Comandante Chávez en 2005. La muerte del líder revolucionario es el suceso más difícil que ha enfrentado como periodista. Foto YVKE Mundial.

 

—El lanzamiento de Telesur fue el 24 de julio de 2005 y usted ya había llegado. ¿Qué hacía antes de esa fecha?

—Para esa fecha ya tenía quince días en Caracas. Había hecho la producción ejecutiva de los noticieros de 25 minutos: ayudaba a construir historias, a conseguir imágenes y colaboraba con la preparación del evento inaugural. La noche antes de la actividad inaugural de la señal de Telesur recuerdo que no dormí mucho porque estaba terminando el libreto. Había tensión, era un evento para el cual había mucha expectativa, había mucha energía concentrada porque a la transmisión inaugural iba a ir mucha gente. La primera frase que dije fue: “Ya está en el aire. La señal deTelesur está en el aire” y compartí ese momento con el periodista brasileño Beto Almeida. Fue una jornada larga y dura que acabó con una sensación de que ahora es que comenzaba el verdadero trabajo. Desde entonces hemos trabajado mucho. Entre todos parimos Telesur.

—Para usted, ¿qué es lo mejor del periodismo?

—Yo no concibo mi vida sin una noticia y tal vez lo mejor es estar al lado de loshechos y de los acontecimientos que están cambiando el curso de la historia, que cambian la historia de miles, de cientos o de un ser humano y poderlo contar. Pienso mucho en la gente que se dedica al periodismo de farándula, porque eso no le cambia la vida a nadie; en cambio, el periodismo al que yo me dedico, al que se dedica Telesur, está siempre del lado de los más humildes, de los más vulnerados y excluidos. Me siento privilegiada de no estar con los poderosos sino con quienes luchan por sociedades más justas.

Recuerdos y anécdotas

—Tengo muchos recuerdos de Cali: el colegio, la vida con mis hermanos y primos, la música marimba, comer chontaduro y la comida del pacífico colombiano. Cali tiene muchas coincidencias con Caracas, una de ella es que es una ciudad musical, particularmente pienso en el gusto por la salsa. No me considero bailarina, pero bailo con mi bebé.

—¿Sus padres son colombianos?

—Sí, los dos son colombianos. Mi papá murió hace muchos años, víctima de la violencia en Colombia. Mi mamá, por fortuna, sí está con nosotros. Ella vive en Calidonde también está uno de mis hermanos. En Medellín vive otro hermano y uno más vive en República Dominicana. Cada uno de ellos es la familia, uno de los vínculos más importantes que uno puede tener. Siempre están allí, pase lo que pase.

Patricia siente que fue una de las afortunadas que ingresaron en la Universidad del Valle, en Cali, luego de presentar una prueba para Comunicación Social y Periodismo.

“Recuerdo que los resultados se publicaron en grandes carteleras en la universidad y yo fui con mi mamá a ver si había pasado. Cuando me hallé en las listas, supe que realmente esa era la carrera que quería estudiar”.

En Internet, en las redes sociales, también hay historias y las quiere aprovechar. Otro reto que viene será Telesur en inglés.

“Que nuestra señal en español siga siendo fuerte, que cuente buenas historias, que siga poniendo las cámaras en el lugar donde están quienes nunca han tenido posibilidades u opciones y que podamos retratar el momento que vive la región es algo que me obsesiona mucho, que esta sea una señal realmente latinoamericana para que quien la vea pueda sentir lo que pasa en nuestros pueblos. Estos son mis retos en la medida en que son los retos de Telesur”, dice Patricia.

  

La vida de Patricia Villegas está marcada por Telesur. Cuando el canal era solo un proyecto ella vino a Venezuela y formó parte del equipo que lo concretó. Foto YVKE Mundial.

 

—¿Cuál ha sido el hecho más difícil que ha enfrentado como periodista?

Espera quince segundos, suspira y responde:

—La muerte del comandante Chávez. Ese 5 de marzo yo iba hacia el Hospital Militar porque había logrado que el hermano del comandante, el profesor Adán Chávez, me diera una entrevista y habíamos organizado todo desde muy temprano. Iba en camino cuando se informó la noticia y al llegar ahí fui, por muchas horas, la única periodista que estaba en el lugar. En ese momento no pensé que lo que yo estaba narrando era la única información que había sobre un suceso mundial. Estuve en el lugar donde llegaron cientos de miles de personas humildes del pueblo deVenezuela a llorar a su comandante. Había mucho dolor y es difícil no impregnarse de eso, pero al mismo tiempo me hacía la exigencia de mantener la calma. Mi rol era fundamental para transmitir los mensajes que las autoridades estaban dando alpueblo venezolano.

Continúa el relato:

“Todo el mundo lloraba, pero el periodista no puede llorar frente a cámara y creo que eso fue muy rudo para mí porque desde ese día hasta hoy yo lamento mucho que el comandante se haya muerto y si hubiera estado en mi oficina hubiera trabajado igual, pero hubiera podido llorar; en cambio, ese día no pude llorar todo lo que mis sentimientos necesitaban porque estaba asumiendo un compromiso frente a cámara que era determinante para lo que hoy vive el país”.

—¿Lo más difícil de presidir Telesur?

—Este trabajo no deja tiempo para otra cosa que no sea eso. Requiere mucho esfuerzo físico para poder dedicarle 10 o 15 minutos a Simón y darle alguna de las comidas del día. Cuando era época de lactancia materna fue toda una experiencia porque Simón nació el 14 de abril de 2012 y ese era el año de elecciones enVenezuela por solo mencionar un acontecimiento de todos los que cubre Telesuren América Latina y en el mundo. En ese momento también teníamos un equipo de enviados especiales en Libia, o sea había muchas cosas que me hacían estar pegada al teléfono y con el muchacho lactando, además me maquillaban y peinaban para entrevistar. Lo he podido hacer porque mi mamá me ayudó, los compañeros siempre han colaborado ante llamadas o instrucciones de urgencia, pero también he tenido que sacrificar horas de sueño. Ahora preparo las entrevistas que hago en la madrugada mientras el bebé duerme.

  

Patricia revela un nuevo reto para ella y para el canal: Telesur en inglés. Foto YVKE Mundial.

 

Telesur en el mundo

El canal tiene 20 equipos de corresponsales, conformado cada uno por hasta cuatro periodistas.

En Washington y en Nueva York hay corresponsalías permanentes, además de una red de colaboradores en el país norteamericano.

Patricia Villegas aclara que para cubrir una noticia no hay una fórmula, pero sí algunos elementos que se toman en cuenta: el número de personas que está impactada por un determinado hecho, preguntarse qué pasará si Telesur no cubre la historia. “A veces la historia no va a ser contada por nadie más, o sea porque a los medios y al poder no le interesa que la cuenten. Ese es un elemento para tomar esa determinación”, añade la periodista.

Afirma que los periodistas de Telesur reciben formación permanente. Se comparten experiencias acerca de cómo construir una buena historia, cómo hacer un buen montaje televisivo, cómo editar, cómo enviar material mediante la red. Y hay debates políticos, periodísticos y sobre el uso y manejo de fuentes.

Le cuesta imaginarse en otro lugar que no sea Telesur.

“Mi relación con Telesur es una relación amorosa y aunque no esté, estaré porque venir a Telesur transformó mi vida. Aunque me vaya, Telesur siempre estará en mi vida porque cuando me pregunten por qué estoy en Venezuela, yo diré que vine por Telesur, por eso me mantuve por muchos años aquí y mi hijo es venezolano así que eso me ata más a este pedazo de tierra, a esta nación”.

En cualquier caso, sabe que, cuando se vaya, la acompañará un proceso de duelo. Pero estará segura de haberle dado a la institución todo lo que es capaz de dar, y más. “Quiero irme así, con la sensación de que no estoy en deuda con Telesur”.