Mario Pacheco Morales: ¡Es con usted candidato o candidata de la revolución!
¿Es usted un verdadero revolucionario? Equivale tal condición a una evidente coherencia entre el decir y el hacer. Significa mantener una actitud en sintonía con las aspiraciones de cambio social y una conciencia absoluta de las circunstancias objetivas que en la actualidad amenazan al proceso iniciado hace 15 años. No se trata de vestir más rojo que el guayamate o vociferar muy fuerte una consigna. Es tener visión histórica del momento que vive nuestra sociedad. Y, sobre todo, expresar fidelidad y compromiso total con los intereses del pueblo. ¿Es usted socialista?, es decir, realmente mantiene una postura ante la vida sustentada en la corriente de pensamiento que tiene al hombre, la mujer y a la sociedad como centro de su discurso? ¿Su forma de vida es inherente a lo que pregona: solidaridad, igualdad, compromiso social, desprendimiento, amor al pueblo? ¿Conoce la diferencia entre una visión socialdemócrata reformista y otra socialista revolucionaria? ¿Sabe cuál es su ubicación entre ellas?
¿Se considera usted Bolivariano? ¿Tiene completa aprehensión de que este término va más allá de un simple calificativo caprichoso? ¿Entiende por qué la revolución se nutre de la doctrina bolivariana? ¿El desarrollo de su actividad política está orientado por el preámbulo y el artículo 1 de nuestra Constitución? ¿Está usted realmente consustanciado, formado y comprometido con los planteamientos del bolivarianismo? ¿Está capacitado para argumentar con criterio revolucionario ante la contrarrevolución, las razones de nuestro carácter bolivariano?
¿Es usted Chavista? O sea, ¿Hace el esfuerzo diariamente para asumir, aunque sea en alguna expresión, la metodología política legada por el Comandante eterno? ¿Usted es una político desprendido, sensible ante la injusticia social, sin apego a los bienes materiales, capaz de entregar su vida por un ideal? ¿Su manera de hacer política está movida por la más sincera expresión de amor hacia el pueblo? ¿Es hombre o mujer de un solo discurso, coherente, diáfano, fiel a la visión del mundo que posee? ¿En realidad es usted un convencido de la necesidad de fortalecer el poder popular? ¿Cómo dirigente, qué ha hecho usted por el desarrollo de los consejos comunales y las comunas? ¿Posee usted una formación ética socialista sólida? ¿Revisa usted con regularidad el Plan de la patria y en consecuencia sus actuaciones se dirigen a cumplirlo? ¿Entiende, y actúa en correspondencia, que el poder político no es para enriquecerse sino para servir al pueblo? ¿Es usted consciente que esa curul a la que aspira no es de su propiedad sino del pueblo a quien solicita su voto?
Cuando esté en campaña, antes de ir casa por casa, viendo los ojos a la gente, a esa gente que ha sido la base social de la revolución bolivariana; gente del pueblo que tiene cifrada sus esperanzas en este proceso, hágase un examen de conciencia; respóndase a si mismo estas preguntas y después, sobre todo, respóndale al pueblo raíz y fuente del poder soberano.
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