El Imam del rezo del viernes de Teherán el ayatolá Seyed Ahmad Jatami ha advertido a Estados Unidos que un posible ataque contra Irán resultaría un total fracaso.
“A nosotros no nos interesa la guerra y nunca empezaremos una, pero si los estadounidense vuelven a tentar su suerte (y atacar a Irán), sus soldados volverán a casa en ataúdes”, ha señalado el ayatolá Jatami.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, entre otros funcionarios estadounidenses, volvió el jueves a amenazar a Irán con una guerra, pese a la conclusión de los diálogos nucleares.
El secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter.
El clérigo ha considerado que las alegaciones de EE.UU. según la cuales el reciente consenso nuclear ha evitado el acceso de Irán a la bomba atómica son “mentira”, al reiterar que Teherán nunca ha buscado desarrollar armas de destrucción masiva, porque lo prohíbe el Islam.
El ayatolá Jatami ha defendido el lema “Muerte a EE.UU.”, y ha afirmado que los iraníes seguirán coreándolo, por la actitud de las autoridades estadounidenses.
“Es imposible ser testigo de los crímenes saudíes en Yemen, las atrocidades del régimen israelí (contra los palestinos) y las de los terroristas en Siria, sin darse cuenta de que EE.UU. está detrás de todo”, ha precisado.
El Imam del rezo de este viernes de Teherán ha condenado el silencio de la comunidad internacional ante la continuación de los ataques saudíes, iniciados hace más de 4 meses contra el territorio yemení, la muerte de civiles inocentes y la destrucción de la infraestructura del país más pobre del mundo árabe.
“A las organizaciones internacionales lo único que no les importa son los derechos humanos, solo sirven a los intereses del imperialismo”, ha criticado.
Además se ha referido a la represión de los bareiníes por parte del régimen de Manama, y ha aseverado que la revolución en este país triunfará.
“Baréin se ha convertido en una cárcel para sus ciudadanos, y los musulmanes han sido sometidos a la tortura, pero esta nación oprimida debe saber que la sangre de sus mártires garantizará su triunfo”, ha concluido.
Desde febrero de 2011, los bareiníes protagonizan manifestaciones casi diarias contra la monarquía Al Jalifa, para reclamar, entre otros, el fin del monopolio de poder y la instauración de un sistema constitucional y un poder judicial independientes.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, entre otros funcionarios estadounidenses, volvió el jueves a amenazar a Irán con una guerra, pese a la conclusión de los diálogos nucleares.
El secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter.
El clérigo ha considerado que las alegaciones de EE.UU. según la cuales el reciente consenso nuclear ha evitado el acceso de Irán a la bomba atómica son “mentira”, al reiterar que Teherán nunca ha buscado desarrollar armas de destrucción masiva, porque lo prohíbe el Islam.
El ayatolá Jatami ha defendido el lema “Muerte a EE.UU.”, y ha afirmado que los iraníes seguirán coreándolo, por la actitud de las autoridades estadounidenses.
“Es imposible ser testigo de los crímenes saudíes en Yemen, las atrocidades del régimen israelí (contra los palestinos) y las de los terroristas en Siria, sin darse cuenta de que EE.UU. está detrás de todo”, ha precisado.
El Imam del rezo de este viernes de Teherán ha condenado el silencio de la comunidad internacional ante la continuación de los ataques saudíes, iniciados hace más de 4 meses contra el territorio yemení, la muerte de civiles inocentes y la destrucción de la infraestructura del país más pobre del mundo árabe.
“A las organizaciones internacionales lo único que no les importa son los derechos humanos, solo sirven a los intereses del imperialismo”, ha criticado.
Además se ha referido a la represión de los bareiníes por parte del régimen de Manama, y ha aseverado que la revolución en este país triunfará.
“Baréin se ha convertido en una cárcel para sus ciudadanos, y los musulmanes han sido sometidos a la tortura, pero esta nación oprimida debe saber que la sangre de sus mártires garantizará su triunfo”, ha concluido.
Desde febrero de 2011, los bareiníes protagonizan manifestaciones casi diarias contra la monarquía Al Jalifa, para reclamar, entre otros, el fin del monopolio de poder y la instauración de un sistema constitucional y un poder judicial independientes.
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