Ahmadineyad: “Irán no se moverá ni un ápice de su derecho a la energía nuclear”
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, restó este miércoles importancia a las sanciones contra su país y reiteró que Teherán continuará con su programa nuclear/ Foto: Archivo
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, restó este miércoles importancia a las sanciones contra su país y reiteró que Teherán continuará con su programa nuclear; mientras que el Parlamento pidió la expulsión del embajador británico por las penalidades impuestas por Londres contra bancos iraníes.
“Irán no se moverá ni un ápice de su derecho a la energía nuclear, dijo Ahmadineyad en un discurso en Pakdasht, al sur de Teherán, en la reacción oficial iraní más importante hasta el momento a la decisión de lunes de Estados Unidos y dos de sus aliados de imponer más sanciones a Irán por su programa nuclear.
“Lo dijimos en varias ocasiones y lo volvemos a repetir: No tenemos ninguna bomba nuclear, no queremos ninguna y no necesitamos ninguna”, agregó el presidente iraní, citado por la agencia de noticias DPA.
Respaldo de China y Rusia
Por otra parte, China se opuso a las sanciones acordadas por Canadá, Estados Unidos y Reino Unido contra Irán por su programa nuclear, postura que adoptó Rusia.
“China siempre se opuso a las sanciones unilaterales sobre Irán”, dijo el portavoz de la cancillería china, Liu Weimin, en rueda de prensa.
Precisó que presiones y sanciones sólo complicarán y “agravarán la situación e intensificarán la confrontación”, y advirtió del potencial efecto negativo para la paz y la estabilidad en el Golfo Pérsico.
La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) aseguró en un informe la semana pasada Teherán desarrollando un programa nuclear que podría tener “una posible vertiente militar”.
Como respuesta, Canadá, Estados Unidos y Reino Unido anunciaron sanciones suplementarias en los sectores petrolero y bancario iraníes, a fin de aislar más a la República Islámica.
La Unión Europea (UE), con Francia a la cabeza, también ha evocado la posibilidad de endurecer las sanciones que ya aplica sobre Teherán.
Rusia, se opuso a las sanciones occidentales, considerándolas “extraterritoriales, inaceptables y contrarias al derecho internacional”.
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