Por Carolina Ceballos,
Es la primera vez que voy a un secretariado,
una reunión donde los militantes y la directiva del MRT, se unen para tomar las
decisiones de las estrategias a seguir por el movimiento.
Estaba asustada, me pasaron buscando por el
terminal de la bandera en caracas, me citaron a las 8 am. El recorrido se hizo
cómodo, pues veníamos debatiendo sobre la situación política del país, tema que
me apasiona. Al llegar nos recibió Katherine Mosquera. Bajamos y entramos al
salón donde comenzaría la reunión, al pasar lo que encontré fue un calor
impresionante, no solo por el sol de la costera Vargas, que de por si era
abrasador, sino por ese calor humano que tenia tiempo sin sentir.
Llegué a un sitio donde directiva y base
eran iguales, donde todos comíamos lo mismo, donde la sonrisa combatía la
timidez, y un aplauso impulsaba a seguir el camino que debemos recorrer sin
dudar buscando un mundo mejor, donde no existan mas explotados, donde el pueblo
ejerza sus derechos, donde la igualdad este a la orden del día… donde se
trabaje por un colectivo y no por un individual, desenmascarando a aquellos que
solo quieren desangrar a la patria tras un disfraz de revolucionarios.
Me sorprendió mucho ver como una camarada de
Barinas asumía su trabajo a pesar de haber salido del hospital hacia dos días,
cosa que admire y respete, el camarada Hipólito con su cuadro de salud
delicado, la camarada Lisbeth Pinto, la cual me entere esta hospitalizada,
estaban allí. Vi el valor de los camaradas, donde el bienestar de un pueblo
esta por encima de cualquier cosa, y es que así debe ser, ese el compromiso, es
la lucha, es el amor que impulsa a TUPAMARO a seguir, a dar la batalla por un
mundo mejor.
El amigo Tupamaro de Lara, Alberto Rolland,
a quien envío mis respetos, me pidió que escribiera algo sobre el secretariado
extraordinario de Vargas, pues lo van a publicar en un diario comunal, en
Cabudare, estado Lara y en el blog HORA
COMUNITARIA. Hablé con Kanica y saldrán dos, uno político que debo escribir, y
este, que sale del corazón, y es que solo se sentir, y ese sentimiento lo
transformo en palabras.
Ese día vi mas que nunca la unidad,vi a la
familia tupamaro. Quiero expresar mis respetos a Deivis Chirinos, a Fabian
Pinto, a Lisbeth Pinto, a Hipólito, a Ares, al profe Camilo, en fin a todos
pero en especial a un hombre cuya paciencia es la que me guia me impulsa a
seguir… a Kanica.
Orgullosa
de ser Tupamaro.
Carolina
Ceballos
Un
agradecimiento a mi amigo escritor, Oscar Sierra, colombiano, radicado en Costa
Rica, y a Franklin Villavicencio, un gran colaborador Zuliano, por ayudarme en
la revisión y corrección del artículo.
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