NO SOLO SE QUITAN LA CARETA...
Ante las declaraciones del subsecretario de Recursos Energéticos del Departamento de Estado Norteamericano Francis R. Fannon , de asfixiar económicamente al pueblo venezolano, hasta lograr derrocar al Gobierno Legítimo de Nicolas Maduro, debo decir que:
Definitivamente e independientemente de los antagonismos que existen en el seno de la izquierda, sin entrar en polémicas de que lado está la razón, lo que está claro es la disposición de los yankis por la vía de la asfixia económica, tumbar a Maduro y la razón se centra según mi punto de vista, en que Maduro y gran parte de sus colaboradores más cercanos de acuerdo a esta manera de proceder, deben dejar el poder por la vía del asesinato, o sea, salir de Miraflores con los pies hacia adelante y por supuesto, para escarmentar a éste pueblo indoblegable, generar una matanza de cientos de miles o quizás millones de ciudadanos para cobrarles el atrevimiento de querer ser libres. Simplemente es así, el imperio, sus aliados europeos y algunos países lacayos de Latinoamérica comandados por el hermanito pobre y arrastrado de la OTAN, el anacrónico Reino de España, han decidido según sus cálculos, darle la estocada final al Gobierno de Venezuela, sin medir las consecuencias de un acto que podría significar el inicio de una guerra total en nuestro continente.
No le vale a los yanquis y a sus lacayos una salida electoral, hay allí una Constitución que los amarra a la legalidad desde su comienzo, cuando literalmente el Articulo 1 reza: "La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional, en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador.
Son derechos irrenunciables de la Nación, la independencia, la libertad, la soberanía, la inmunidad, la integridad territorial y la autodeterminación nacional".
Eso para ellos es intolerable, sus planes de ocupación y neo-coloniaje, pasa por la derogación de ésta para mi, aún incompleta Constitución Nacional y dar por toda la calle del medio un cruento golpe de estado, que anula de inmediato nuestra Carta Magna. Por ello digo que no solo se quitan la careta sino que, gritan a los cuatro vientos con cinismo y sin rubor, sus aviesas intenciones, el rumbo de ésta historia sigue su agitado curso, amanecerá y veremos.
Manolo Sílva
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