En Carvajal, edo. Trujillo, tienen “
la mejor Escuela Artesanal del país ”
Banesa
Angulo
Gráficas:
José Ramírez
El trabajo de estas ingeniosas manos
recorre los rincones del estado, a través de exposiciones. Las piezas
elaboradas en esta institución son conocidas en otros países, ya que han venido
personas de otros lugares del mundo en temporada de vacaciones a participar en
los cursos. Lo que elaboran se lo llevan a su país de origen y eso ha dado el
reconocimiento internacional a esta escuela.
En una tarde amena, llena
de colores, creatividad e ingenio, disfrutaron los asistentes al cierre de año
de la Escuela de Artesanía y Labores “Pbro. Francisco Viloria” en su XLV
Promoción denominada “Movimiento por la Paz y la Vida”. Esta escuela que se
encuentra ubicada en el municipio San Rafael de Carvajal, ha logrado, a lo
largo de estos años, formar en distintos oficios a mujeres y hombres de
diferentes edades. Desde 1969 esta escuela forma mujeres, hombres y niños de
diferentes edades. Una vez más culminan un año lleno de éxitos; con danzas
tradicionales dieron inicio a esta exposición, la cual estuvo abierta al
público durante tres días.
Cinco exhibiciones en
diferentes modalidades presentaron sus alumnos: Artesanía, Corte y Costura,
Lencería, Pantuflas, Bolsos, Muñequería y Bordado, Tejidos, Repostería y
Culinaria, Manualidades y Cortina.
En la actividad participó
la Licenciada Lila Morillo, fundadora y directora de la Escuela de Danzas
“Amanecer Andino”, el director del Aeropuerto Antonio Nicolás Briceño, Aníbal
Villegas, quien es Padrino de la Promoción 2014, Reily Moncayo, en
representación del Coordinador de Cultura, Edgar Barreto, la profesora Diana
Cevallos, madrina de esta promoción, entre otros.
En un recorrido por las
exposiciones se pudo constatar el empeño y la entrega de las personas que hacen
vida en esta escuela y a su vez se conversó con los facilitadores de estos
cursos, quienes expresaron:
Ester Colmenares,
instructora de Manualidades y Cortina: “Este curso dura todo el año escolar,
pueden participar los niños a partir de los 12 años de edad, ya que se trabaja
con máquinas de coser, silicones, y para evitar accidentes trabajamos con
alumnos de esta edad en adelante”.
A este taller no solo se
unen niños y mujeres, también los hombres participan en este oficio. El curso
inicia entregando patrones, las medidas con que corta una tela, la elaboración,
pasa lo mismo con las cortinas, se entregan los patrones y la cantidad de tela
por metro. El reto más grande para un aprendiz es coser a máquina, ya que la mayoría
de las personas no tienen conocimientos previos a este curso”.
Carmen Ramona Simancas,
instructora de lencería, pantuflas y bolsos,
con más de 20 años de servicio: “Las clases de lencería se dictan los
días lunes, martes y miércoles, las pantuflas los jueves y viernes por el uso
del pegamento”.
Diana Cevallos, profesora
de tejidos de la Escuela Francisco Viloria y organizadora de los encuentros de
Artesanos Tejedores, acompañada de la Coordinación de Cultura del estado
Trujillo: “Todo lo que ven es obra de mis manos y las de mis alumnas, este es
el trabajo de todo lo que se hizo a lo largo del año, producto de esfuerzo y
empeño”.
Jefferson Ramírez,
instructor de la cátedra repostería y culinaria: “Aquí las participantes
aprenden todo lo referente a repostería básica, arte culinario. De esta cátedra
se gradúan ocho participantes”.
Cristina Barrios,
profesora de corte y costura, comenta que este es un proceso largo en el cual
algunas alumnas aprenden con facilidad mientras que a otras se les dificulta un
poco. En este oficio ya tiene 21 años de los cuales ha pasado 10 en esta
escuela.
Cabe destacar que la
mayoría de las piezas son elaboradas con material de reciclaje, dándole valor a
lo que es la concientización en la preservación de nuestro planeta, sembrando
valores en los niños, mujeres y hombres que participan de estos cursos.
El trabajo de estas
ingeniosas manos recorre los rincones del estado, a través de exposiciones. Las
piezas elaboradas son conocidas en otros
países, ya que han venido personas de otros lugares del mundo en temporada de
vacaciones a participar en los cursos, lo que elaboran se lo llevan a su país
de origen y eso ha dado el reconocimiento internacional a esta escuela.
La escuela se ha
convertido en una alternativa económica para las personas interesadas, ya que
cada papel y cada botella que es considerado como basura, se puede transformar
en una obra de arte.
Marlene de Paredes,
integrante de la cátedra de muñequería y bordado, relata que ha sido una
excelente experiencia, en la cual ha aprendido mucho. “Este oficio me sirve a
la hora de llevar el sustento a mi hogar y de depender económicamente de esto”.
Para los interesados, las
inscripciones están abiertas a partir del mes de octubre, comienzan de lleno
con los adornos de navidad, trabajos en madera country, pintura, diseño y
revestimiento de jarrones, botellas transformadas en obras de arte, jarras
antiguas convertidas en increíbles decoraciones.
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