PIEDAD CORDOBA LLEGO A BRASIL PARA CONCRETAR LOGISTICA DE LIBERACIONES

La organización Colombianas y Colombianos por la paz (CCP) encabezada por Córdoba indicó, el pasado domingo, que Brasil colaborará con el apoyo técnico del operativo humanitario
El 8 de diciembre las FARC anunció la entrega unilateral de 5 personas secuestradas en el 2007
La defensora de los derechos humanos la colombiana Piedad Córdoba, llegó este martes a Brasil para reunirse con las autoridades de ese país y concretar detalles logísticos de las próximas cinco liberaciones unilaterales por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La organización Colombianas y Colombianos por la paz (CCP) -encabezada por Córdoba- indicó, el pasado domingo, que Brasil colaborará con el apoyo técnico del operativo humanitario. Delegados del Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) también participarán en las liberaciones anunciadas por las FARC.
El pasado 8 de diciembre las FARC anunció la entrega unilateral del mayor de la Policía Guillermo Solórzano; el cabo del Ejército Salín Sanmiguel; el infante de marina Henry López Martínez y de los concejales Marcos Vaquero y Armando Acuña. Los cinco fueron tomados cautivos de 2007 a 2010, en distintos hechos.
Por su parte, las colombianas Clara Rojas y Consuelo González celebraron este lunes el tercer aniversario de su puesta en libertad por el grupo guerrillero y llamaron a las FARC a liberar a los retenidos.
“Es un momento de reflexión”, declaró Rojas a la prensa local. Ambas ex-retenidas coincidieron en que el movimiento insurgente libere a los cinco anunciados, así como a los otros 15 militares, policías que retienen con fines de canje por presos y demás cautivos.
“Sería ideal que los liberaran a todos”, acotó Rojas, con quien González estuvo de acuerdo.
Consuelo González, espera que los colombianos avancen en el objetivo de “encontrar la manera de desaparecer este delito tan inhumano y tan cruel del secuestro”.
González fue secuestrada en 2001 cuando ejercía como congresista. Mientras que Rojas, en el 2002, ambas fueron entregadas en el departamento colombiano del Guaviare (sur) a una misión humanitaria coordinada por el CICR y con el apoyo logístico del Gobierno de Venezuela.